decimOctavo

Eso gritaba una niña casi enseguida que el barco, hoy en la mañana, arrancó a andar. Del ómnibus ni les cuento, viajé a lo sandwich apretada entre el pasillo y un señor muy grande y gorodo que ocupaba la mitad de mi asiento.

El barco se movió bastante los primeros 15 o 20 minutos. Mucho viento aparentemente. Pero a medida que nos acercábamos a Buenos Aires, el viaje o la costumbre volvieron el movimiento más tranquilo.

Ustedes, o algunos, se preguntarán porqué tanta alharaca a mi viaje. Y bueno, para muchos lo que es una simpleza para otros es complicado. Para mí, estar una semana "lejos" y sola es bastante. Y a esto le agrego la particularidad que los últimos días no voy a poder hablar casi con mi novio (pobre... el cual ha sufrido severos atomices) porque él estará haciendo su propio viaje de unos días.

La incomunicación, no tener el control, no estar presente, no poder hablar, no saber, no saber disfrutar sóla, no saber qué hacer si me pasa algo bueno y no se lo puedo contar a alguien "ya", todas esas cosas para mí son muy dificiles. Llegar a un apartamento vacío, sin tele, sin gente, también es dificil.

Asique en parte yo un poquito hoy grito "mamiii me quiero ir a casa". Pero tambien, yo tengo algo que se me presenta en casi todas las situaciones, y es mi dualidad. Vengo contenta a enfrentar esta situación. Vengo con ganas de aprovecharla, de aprender, de dejarme sentir. Claro que eso es un esfuerzo, ya que si me viene un poco de angustia me puteo porque no quiero sentirme mal, pero tengo que aprender a dejarme sentir lo que quiero, que fluya, escucharlo, prestarle atención, y disfrutarlo.

Paso a contarles. El día de hoy fue bastante tranquilo. Demoré en llegar, mucha gente y pocos taxis y muucha lluvia, por lo que esta vez no daba para caminar unas cuadritas hasta encontrar un taxi. Llegué al apartamento y de lo primero que me ocupé fue de mis herramientas de comunicación: el celular y su roaming (el cual luego de un par de quejas hacia Movistar funcionó perfectamente) y la internet de mi netbook, la cual amablemente es prestada por algún vecino que por suerte no le puso clave. Jeje.

Dormí un rato y luego fui a la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. Sede Central del congreso. Por dios.... no se imaginan lo que es esa facultad. Yo me quejo de que la mía, en Montevideo, está hecha bolsa... esta no tiene ni comparación.

Es enorme claro, y apenas la recorrí. Voy a sacar alguna foto para mostrar por aquí, pero está toda absolutamente todas las paredes tapizadas con carteles al estilo centro de estudiantes, folletos, carteleras, reclamaciones de "viva el partido tal" y "no a la corrupción de tal" y "escuchemos a los estudiantes"... impresionante. LLeno de gente. Lleno en los tres pisos que visité parcialmente. Bastantes extranjeros también. Escuché muchas voces mexicanas y brasileras.

Respecto a como me siento, estoy bien. Un poco nerviosa por el congreso, porque todo es grande y con mucha gente, y me siento perdida y chiquita. Y en parte un poco sola también. Después el "estar sola" por ahora bien. Igual hoy me costó un poquito, recuerdo que otros "primeros días" estaba un poco más tranqui, y hoy en la tarde luego de un mini descanzo me invadió un poco de angustia, pero es angustia anticipada, es angustia de nervios. Porque me pone nerviosa y me preocupa el sentirme mal, el extrañar, me enojo conmigo por ser dependiente.... y qué tonta! eso me hace ponerme mal en el ahora. Pero todo es binvenido. Estoy intentando dejar pasar todo lo que tenga que pasar para disfrutarlo, para poder vivir con la incertidumbre, para aflojar un poco el control.

Veremos que tal sigue esto y que tal la noche de hoy!!
Depende de eso si posteo nuevamente o no.

Saludos a todos!!