Compilado mío
17:05 | Author: decimOctavo
+ Estoy pensando en que llueve pila, y que ya me voy. Y que me voy a quedar un rato abajo de la lluvia, para mojarme y que se laven las ansiedades, y a ver si así el FRIO me enseña a esperar, a respetar, a hacer mi vida, y si algún día alguien quiere acompañarme, será bienvenido pero ya no lo necesitaré. Entonces seremos compañía solo cuando ambos dos dispongamos de eso. Y tal vez felices.

++ Y porque las gotas a veces embarran. Pero la tierra necesita mojarse. Asique hay que aprender a tener paciencia, dejar que el tiempo pase porque el sol siempre vuelve a salir y ahi gracias a las gotas todo vuelve a florecer.

+++ Me encuentro con el aprendizaje de la sabidurìa de la incertidumbre. Me encuentro en la aventura de no saber, de no querer saber y de no querer controlar el momento del mañana. Que sè que si estiro el brazo la muerte està a un lado, y por lo tanto, podemos caminar juntas porque en el hoy, es siempre todavìa. La incertidumbre nos da la certidumbre de estar vivos. Y eso es algo que yo tengo que recordar.
La desilución utópica del Frente Amplio
10:52 | Author: decimOctavo

Hace varios días que quiero escribir este post, y me estaba dando el tiempo para procesarlo.
Quizás me quede largo, me cuesta resumir y ser concreta. Pero voy a intentar hacerlo lo más ameno posible porque, por primera vez, lo que escribo aquí quiero difundirlo. Quiero que muchos lo lean, que muchos opinen y me contradigan u opinen igual.


En octubre del 2004 voté por primera vez.


Voté re contenta, festejé cuando ganó el Frente. Vivo cerca del Palacio por lo que fui con mis padres caminando. Era tan alegre irte cruzando con la gente con las banderas algunos, otros con alguna boina. Había sonrisas, había alegría, y yo viví un pueblo unido. Fui un rato a lo de una amiga que vive en Av. Libertador, en un 6to piso a sacar fotos. Y después bajé y me metí entre la gente. Cientos de Cientos de personas. Todas con el mismo propósito. Sentía, aunque yo no lo había vivido en absoluto, pero sentía la recompenza de la lucha. Sentía que esas personas, las más grandes, las más viejas, habían "luchado", aunque sea poniendo su voto, esperando un CAMBIO. Al menos, un cambio de perspectiva, un cambio de prioridades. Sentía que ese día les llegaban sus recompensas. Y lo que más sentía, es que a todos les iban a llegar recompensas. Esa cantidad de gente te contagiaba, al menos a mí me animaba. También me daba miedo, porque sé que muchas personas de esa multitud creían que con Tabaré sus sufrimientos desaparecerían.

Ahora estamos acá, ante mis segundas elecciones nacionales. Muchos dirán, ¿qué sabe ésta que no vivió nada? Y es verdad. Sé lo que me cuentan, sé lo que he leído. Y sé que lo que me cuentan es subjetivo (aunque tengan en cuenta que escucho las dos campanas) y sé que lo que leo es "la historia de los vencedores" como dice Popper. Pero yo me siento parte de ese todo, me siento parte de lo que han vivido generaciones anteriores, me siento parte de la Dictadura, aunque ni yo la viví, y mi familia la vivió pero no la sufrió excesivamente, porque ninguno fue perseguido. El sentirme parte de ese todo, de la Sociedad, me hace por ejemplo, apoyar el NUNCA MÁS.

Sé que ahora tengo otra persepctiva, porque ahora el frente ya gobernó. Porque ahora en mis clases discuto más de política, y siempre tiendo a ver las dos mitades en estas cuestiones. Sé que ahora puedo agarrar el programa del frente y ver qué hizo de lo que prometió, y se que puedo mencionar al menos diez problemas del Plan de Emergencia. Y sé también que hicieron mucho "típico de los demás partidos", pero ¿qué esperábamos?

Hay un autor que me encanta, A. Gramsci. Es un post-marxista, que reformuló la teoría marxista, fundó el Partido Comunista en Italia, y a mí entender, fue un hábil lector de la realidad.

Primero lo básico: Gramsci en su época vé como el Partido Católico de Italia va consiguiendo muchos seguidores. Entonces la regla básica de un Partido Político debe ser convencer a la gente para encontrar estos seguidores. Gramsci entonces quiere hacer lo mismo que la Iglesia, ganar adeptos.

Y esto lo hacen todos los partidos, y no hay forma de que el frente no lo haya hecho. “Comprar votos”, con plata, con asado, o con discursos, es parte intrínseca de la Democracia. A esta realidad apunto, a que hay cosas que son inherentes en los partidos políticos, y que cualquier "progresista", también las tiene. Creo que el deber nuestro, como votantes, es poder diferenciar estas cosas y evaluar las otras. Que no tendríamos que caer en la crítica fácil “hacen todos lo mismo”, sino analizar un poco más allá.

Segundo lo central: Gramsci habla de los Partidos Utópicos y de los Partidos Gobernantes. Interesantísima es su postura. Según él, un Partido Político SOLO puede tener ideas/planes utópicos, cuando es oposición. ¿Porqué? Porque la propia estructura del sistema político democrático así lo genera. La función de la oposición es por tanto, tirar ideas utópicas que impulsen al Partido Gobernante.

Por otro lado, el ser un partido utópico le permite a ese Partido Político ir ganando fuerza, ir ganando adeptos (¿les va sonando?). Finalmente, el partido utópico gana alguna elección y los papeles se invierten, y pasa a ser un Partido Gobernante. Por definición nuevamente, sus ideas utópicas dejan de poder ser llevadas a cabo. Por la nueva oposición que aparece, por la propia burocracia, y porque al gobernar, al llevar las riendas eso se pierde. Explicaciones de esto, hay muchas. El consenso de algunos politólogos que he leído es que son cuestiones estructurales. A mi me gusta lo que dice otro autor, Marcuse, que hace referencia las definiciones perfectas que hay de todo, y como no son adaptables a la realidad. Por ejemplo, por definición la “Democracia” es el mejor camino político existente (al menos es el consenso generalizado entre cuentistas sociales), pero en la práctica hay muchos claro-oscuro. Porque hay ciertos hechos “democráticos” que lindan lo “totalitario”, y la exclusión generada por la propia democracia, etc. Y esto es lo mismo aplicado al Partido Político gobernante. Si continuara con sus ideas utópicas (opositoras mayoritariamente) no podría gobernar. Además, cada partido, según Gramsci y yo concuerdo, está formado por los intereses de un grupo particular, pero precisa a su vez la “amistad” de los otros, y por eso al gobernar tiene que abrir sus círculos de inclusión.

Y por este lado viene lo que yo creo que le pasa a la militancia frente amplista. Varios politólogos han salido a hablar de que el gobierno del Frente Amplio ha sido bueno. Todos coinciden en eso, todos dan cifras de los crecimientos y decrecimientos según correspondan. Interesante me pareció la teoría de Luis Eduardo sobre los militanes del Frente, debido a la menor votación a la esperada que tuvieron. Aunque comparto en parte con Luis Eduardo su opinión, yo más que nada creo que se debe a que era más fácil "luchar" cuando eran oposición. Ahora que están en el gobierno, hay que militar para que sigan gobernando, se hace más dificil porque ya no es utópico. Y lo utópico tiene esa propulsión que lo gobernante no lo tiene.

Miraba las imágenes en la tele de los militantes blancos, festejando cuando ganó Lacalle y con la fórmula Lacalle-Larrañaga. Lo miraba y me alegraba por ellos, y pensaba ¿dónde están los jóvenes del frente? ¿dónde están los militantes?

Mirando el video del acto clausura del Frente, "EL TIEMPO ME ENSEÑÓ", pensaba en todo esto. Y pensaba que el tiempo tiene que enseñarnos a no caer en la indiferencia. Lo utópico ya ha muerto, y los partidos tradicionales aún no saben colocarse en su rol de opositores y por lo tanto aún no son utópicos. Pero no tenemos que creer que los cambios no pueden venir, no tenemos que tachar las cosas buenas que ha habido por las cosas "iguales a los demás" que han sucedido.

Por eso creo que, y esto se lo digo claro sólo a los frente amplistas o ex-frentistas dudosos. Tenemos que comprender que el frente ahora gobierna. Y como escribí hace poco en otro lado, creo que los errores de gobierno del frente no son tan graves. Creo que en una historia de Democracia, con algunas pausas, y que solo gobernaron una vez, lo que hayan hecho, lo que nos haya decepcionado o enojado, yo creo que no justifica quitarles un voto, una oportunidad. Y si estamos enojados con el gobierno, creo, más que nada, que estamos enojados con nosotros mismos. Por la frustración que sentimos de no poder “hacer más”. Y porque muchos, incluyéndome totalmente, nos quedamos en la pasividad, diciendo “quiero más seguridad pero sacame el IRPF que me está matando”. Debemos encontrar en nosotros mismos la realidad que hay hoy. Debemos recordar que la sociedad de hoy no es culpa del frente, sino que es culpa en parte de los gobiernos anteriores, y por sobre todo es culpa nuestra. Porque nosotros también somos de esta sociedad.


Y creo que el cambio de prioridades que mencioné más arriba es lo que ahora deberíamos cuestionar. ¿Queremos eso o queremos volver a las prioridades de antes? La respuesta de cada uno por supuesto que es válida, pero creo que es un eje a considerar.



Espero que se entienda mi opinión y sobre todo lo que quise mostrar al aplicar lo de Gramsci. Tampoco tenemos que criticar a los militantes del frente, yo creo que es un fenómeno entendible y ya estudiado. Debemos recordarles, y recordarnos a nosotros mismos todo lo mencionado arriba. Disculpen si quedó muy largo y repetitivo.

El sentir evolucionado
12:53 | Author: decimOctavo
Eso. Yo creo que mi sentir ha evolucionado.
Siento más complejo pero a la vez ordenado. Siento con calma, y cuando viene la montaña rusa la afronto desde un lugar más disfrutable, y muchas veces puedo disfrutar la vista.

Avanzan las emociones y no desbordan. Aparecen con más pausa y son más identificables. Más duraderas y menos esporádicas.

A veces cuesta adaptarse a lo estable. A un bien estable, a un muy bien, o muy mal estable.